En el año 2013 se forma en Oslo, Noruega, el proyecto en solitario de Katrine Shepard, llamado Sylvaine. Un año más tarde, vio la luz su álbum debut “Silent Chamber, Noisy Heart”. En el año 2016 lanza su segundo trabajo “Wistful”, a través de Season of Mist y finalmente, el pasado año 2018, concretamente el 2 de noviembre, fue editado su tercer trabajo de larga duración, llamado “Atoms Aligned, Coming Undone”, una vez más, a través del sello Season of Mist.
Katrine se ocupa de todos los instrumentos y la voz. Además, para la grabación de “Atoms Aligned, Coming Undone”, contó con la colaboración de Stephen Shepard como baterista en las canciones 3 y 5, y Stéphane “Neige” Paut de la banda Alcest, como baterista en las canciones 1, 2, 4 y 6.
“Atoms Aligned, Coming Undone” se podría definir como un álbum de Blackgaze, etiqueta que puede sonar extraña, pero que resulta de la conjunción del Black Metal, el Post Rock y elementos del Shoegaze. Y quizás os preguntéis, ¿eso suena bien?, pues la respuesta es que si, aunque si estáis acostumbrados al Black Metal más ortodoxo, es muy probable que no os guste en absoluto.
A lo largo de las seis canciones que conforman el disco nos vamos a encontrar con una atmósfera casi celestial, lograda gracias a la bella voz de Katrine, pero esto no significa que no encontraremos voces agresivas, pues es increíble el cambio de registro que puede llegar a conseguir, como veremos más adelante. En el terreno instrumental, estamos mayoritariamente ante melodías cristalinas, ejecutadas por guitarras de corte limpio, alternadas por instantes de trémolos al más puro estilo black metalero; lo cierto es que en una línea muy similar a Myrkur. Te puede gustar más o menos, pero lo que es innegable es que están muy trabajadas y consiguen crear una gran paleta de sensaciones y diferentes atmósferas.
La sección rítmica se mueve principalmente a través de tempos lentos, consiguiendo que el álbum al completo contenga cierto aire melancólico, pero gracias a las melodías esto también se traduce en esperanza y belleza. Aunque también nos encontraremos con instantes de ritmos veloces e incluso caóticos.
En cuanto al registro vocal, como comentaba anteriormente, el registro mayoritario es de corte angelical, transmitiendo cierto candor; fantasmagórico incluso, si se quiere. Pero la grata sorpresa viene dada por los instantes de shrieks, los cuales son crudos y tremendamente violentos, los cuales transmiten una sensación de gran dolor. Los cambios vocales solo pueden ser tachados de impresionantes.
En definitiva, si te gustan las nuevas tendencias, seguro que disfrutarás de un disco como “Atoms Aligned, Coming Undone”. Dale una oportunidad y juzga por tí mismo.
Nota: 7
Autor: Ramón
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