Los trozos de madera iban cayendo con lentitud. El joven guerrero estaba construyendo un nuevo escudo. El anterior, fue destrozado en la última batalla contra los Oss. Necesitaban las tierras de ese pueblo. Solo así podrían ganarse el miedo y el respeto del resto de reinos colindantes. A pesar de no llegar a la veintena, ya había peleado en multitud de contiendas. Su cuerpo, lleno de cicatrices así lo demostraba. Sin embargo, al caer la noche, toda su valentía desaparecía. Al dormir, unas horribles pesadillas lo asaltaban. Todos aquellos que habían muerto bajo su espada, volvían para acabar con él. Le cortaban lentamente brazos y piernas. Después, abrían su pecho, extrayéndole el corazón. La ensoñación se repetía una y otra vez desde hacía un mes. Era consciente de que estaba perdiendo la cabeza. No obstante, deseaba entrar en combate nuevamente, ya que solo así conseguía despejar su maltrecha mente….
Bienvenidos al universo de Pagan Reign.
El sexto trabajo del combo de Extreme Melodic Folk Metal Pagan Reign «Once Again», vio la luz el 22 de diciembre de 2018, vía Yarko Music Production.
Su alineación es: Orey (guitarra y voz), Vetrodar (guitarra, bajo e instrumentos folks), Dimosthen (batería).
Antes de escribir una sola palabra más, tengo que comentar que ODIO este tipo de Metal. Siempre me ha resultado excesivamente facilón. Una vez aclarado este hecho, vamos a encarar la reseña ¿vale? El power trio ruso se ha marcado un trabajo realmente loable, repleto de momentos memorables que hará las delicias de todo aquel que disfrute de esta clase de propuestas. El redondo no tiene una sola fisura, exponiendo unas tonadas ambiciosas a la par que variables. Eso sí, en ocasiones, llegan a pecar de alargarlas en exceso. Cambiando de tema, y metiéndonos en el apartado de la producción, ésta es cristalina. Por otro lado, respecto a la portada, me ha parecido insulsa.
Al escuchar las seis cuerdas de Orey y Vetrodar, llegaréis a una orgía de dobles armonías cargadas de melodías que se os quedarán grabadas a fuego en la mente. Los riffs los hallamos fluidos, veloces, acústicos y pausados. No nos faltan las acometidas a una cuerda ni las pinceladas de correctos solos por aquí y por allá.
Iracundos y predominantes shrieks comparten espacio con unos anecdóticos growls y barítonos limpios. Como podéis observar, el apartado de los registros vocales viene cargado de tonos diferentes entre sí.
Los parches son tan dinámicos como enérgicos. Buenos giros de recorrido los que se marca el señor Dimosthen con sus tambores.
Realmente, no destacaría ningún tema en concreto. Todos están a muy buen nivel.
Señores, vale que no me haya gustado nada el Elepé, pero eso no quiere decir que estos tíos lo hagan mal. Hacedme caso y echadles un oído.
Nota: 6
Autor: Chus
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