El cielo comenzó a encapotarse con unas extrañas nubes de un azul mortecino. Mientras, el sol se iba apagando muy despacio. Al pie de la enorme montaña, observando el extraño fenómeno, se encontraba una solitaria figura. Ataviada con una pesada túnica negra, la bruja comenzó a realizar una serie de movimientos con las manos. El suelo comenzó a temblar en tres zonas relativamente muy próximas entre sí. Acabó resquebrajándose, emergiendo tres enormes rocas. La hechicera comenzó a levitar, colocándose justo arriba de las piedras. El hechizo tan solo había comenzado. Si todo salía con éxito, volvería a traer al engendro cósmico conocido como Racus a la Tierra…
Bienvenidos al universo de Myopic.
El pasado 9 de noviembre de 2018, Grimoire Records lanzó al mercado el primer L.P homónimo del combo de Sludge Black Metal Myopic.
El conjunto lo forma: Nick Leonard (bajo y voz), Michael Brown (batería), Sean Simmons (guitarra y voz).
Señores, tenemos ante nuestras narices un álbum más que correcto. El interesante debut de los americanos, al menos para este humilde redactor, ha sido como si los primeros Mastodon, en vez de tener ese punto tan bueno de técnica de la cual hacían gala, hubiesen optado por incluir mucho «Metal Negro». Si al leer esta breve descripción, la curiosidad no os corroe mal vamos, o mejor dicho vais. El disco resulta terriblemente enérgico y variado, exponiendo unas composiciones oscuras a la par que dramáticas e incluso «rockeras» si se da el caso. A pesar de ello, y de demostrar con creces que pueden desarrollar de forma muy extensa sus tonadas, a veces, he llegado a tener la sensación de que están alargadas en exceso. No obstante, lo cortés no quita lo valiente, y lo que es bueno es bueno, mas esa característica ha hecho que baje su nota final.
Con la producción no hay pegas. Os vais a estampar con una muralla sónica sucia pero no absurda. En cuanto al artwork, creo que refleja perfectamente la música del plástico en cuestión.
Poderosos, punzantes, pausados… Estos adjetivos son muy acertados a la hora de describiros los guitarrazos de Sean, que no duda en deleitarnos con riffs fluidos, pesados y disonantes. Las dobles armonías y los instantes a una cuerda están con cuentagotas. Asimismo, no esperéis solos.
En el apartado de las voces, preparaos a un doble ataque de clean vocals insidiosas y registros violentos.
El protagonismo del bajo es digno de ovacionar. Da gusto cuando las cuatro cuerdas no pasan desapercibidas.
No os va a faltar celeridad en los parches. Existe un gran equilibrio entre up y mid tempo. Bien por ellos.
Debido a la solidez del Elepé y la carencia total de altibajos de calidad, todos los tracks están al mismo nivel. Digo esto, porque me resulta imposible recalcar alguno. Tan solo os digo que, si os gustan los himnos, con ‘Swallowing Depths’ vais a alucinar.
Esperemos que sigan este camino. Atrayente inicio de carrera.
Nota: 7
Autor: Chus
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