Casi sin darse cuenta, la corrupción fue implantándose en su hasta no hace demasiado espíritu puro. Cada segundo que asaba le era más difícil poder rendir pleitesía al Todopoderoso. No entendía la actitud dictatorial y controladora que tenía frente a todas sus creaciones, incluido por supuesto él mismo. ¿Es que acaso el Hacedor disfrutaba viendo las tribulaciones internas de los seres que el mismo había creado? El responsable de hacerle abrir los ojos respecto a su propia situación y la de todos los que le rodeaban fue sorpresivamente la mano derecha de la deidad: Satán. Éste planeaba una rebelión y conquistar el Paraíso. ¿Qué debía hacer, unirse a su hermano o seguir los designios del padre de todo y todos?…
Bienvenidos al universo de Shamael.
La One Man Band de Funeral Doom Metal Shamael, capitaneada por Raffaele Galasso, editará el 15 de abril de 2021 gracias a Negre PlanY/Negra Nit distro, Satanath Records y Blood Fire Death su Elepé debut «Melancholie der Engel».
Asfixiante, agónico, rotundo…. Esos tres adjetivos definen perfectamente lo que el italiano ofrece en su primer Larga Duración. A lo largo de las cuatro tonadas que forman el asalto, los teclados cobran muchísima importancia, ya que actúan de perfecto e incómodo colchón sónico para unas «hachas» opresivas hasta decir basta. Por supuesto, y a grandes rasgos, las composiciones son simplistas y realmente extensas, haciendo las delicias de los amantes del género anteriormente mencionado. Sin embargo, creo que para muchos eso es precisamente su talón de Aquiles. O se es afín a cosas así, o es muy posible que la escucha del redondo que hoy os comento se le haga eterna a más de uno.
Las moribundas seis cuerdas os machacarán el cráneo hasta que tan solo quede un amasijo de huesos y carne irreconocible. Riffs a golpes, dobles armonías y puntuales instantes pausados son las herramientas usadas para lograrlo.
De las voces, poco se puede describir. Preparaos para un chaparrón de growls con anecdóticas apariciones de clean vocals maquiavélicas.
Por supuestísimo, no existe ni el más mínimo atisbo de velocidad en la percusión. Aquí tan solo hay down tempos y mid tempos incontestables.
No destacaría ningún tema. En el buen sentido de la frase, todas están cortadas por el mismo patrón, no sé si me explico.
Si buscáis algo realmente aplastante, iracundo y depresivo echadle un oído.
Nota: 7
Autor: Chus
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