El 29 de octubre, la banda de Blackened Death Metal belga, Goat Torment, regresaron con su tercer álbum de larga duración, titulado “Forked Tongues”, lanzado a través de Season of Mist Underground Activists en CD, vinilo y formato digital.
La formación de Goat Torment la conforman Kwel (guitarra, bajo y voz) y Torturer (batería). Además, en la grabación del álbum y la composición han contado con Vagus Nox en la guitarra y el bajo, miembro de bandas como Malhkebre o Sektarism, así como antiguo miembro en directo de bandas como Satyricon, Shining o Arkhon Infaustus, entre muchas otras.
Goat Torment no son, ni mucho menos, unos novatos en la escena y eso es algo que se plasma perfectamente en el nuevo trabajo de los belgas, quienes a lo largo de nueve canciones y cuarenta y tres minutos de duración van a ser capaces de dejarte atónito y sin respiración. Desde los primeros compases de su primer tema ‘Pantheon of Devourment’, la velocidad y explosividad de su batería van a marcar el inicio de un trabajo realmente endemoniado, el cual exuda agresividad y melodía a partes iguales. Como, sin duda, os vais a dar cuenta, el trabajo recoge una gran influencia de bandas como Belphegor o la etapa más actual de los polacos Hate, lo cual se traduce en riffs cargados de melodías oscuras, cabalgando entre velocidades inhumanas y secciones de mid-tempos, siendo estas últimas las creadoras de una atmósfera malsana que ayudan a enfatizar ese ambiente oscuro que fluye a lo largo de todo el disco. Por si esto no fuera suficiente, Goat Torment incluyen una serie de solos de guitarra en su mayoría de corte melódico, pero sin perder fuerza en ningún momento; lo cual hace que el trabajo sea aún más dinámico de lo que ya es sin la inclusión de esos solos.
En cuanto a la sección rítmica, sin duda es una de las protagonistas del disco. El trabajo de Torturer es absolutamente demoledor, moviéndose entre blastbeats y mid-tempos, por lo que el álbum no tendría la pegada y la fuerza que tiene sin la aportación sobresaliente de la batería y sus múltiples cambios de ritmo.
La voz, en la mayor parte del disco se transmite a través del growl, pero también nos vamos a encontrar con voces rasgadas rozando el shriek, por lo que, en líneas generales, estamos ante dos registros.
En definitiva, Goat Torment han lanzado un álbum sobresaliente a la par que adictivo. Personalmente, se me ha hecho corto y me ha dejado con ganas de mucho más. Lo que está claro, es que no hay que perderle la pista a esta banda, pues está destinada a recoger el testigo de los grandes grupos de Blackened Death Metal y situarse en lo más alto del panteón de dicho género.
Nota: 9
Autor: Ramón
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