Crítica: Varices - The Undoing (2024)

Los tres estaban conscientes. Podían percibir cualquier cosa que les ocurriese a todos los niveles. Sin embargo, la cantidad de sustancias que le habían suministrado, les impedía no solo hablar, sino también moverse. La intervención quirúrgica comenzó. La intención de aquel atajo de chiflados era unir los tres cráneos para dejar un único cerebro que tomaría el control de todas las partes. ¿A quién en su sano juicio podría si quiera ocurrírsele tal aberración? El dolor era indescriptible e impresionante. Tanto, como mantener el conocimiento con todo lo que estaba ocurriendo. Supo el momento exacto en que sus otros dos compañeros de fatigas dejaron de respirar. ¿¡Qué clase de pesadilla estaba viviendo!?
Bienvenidos al universo de Varices.

El 1 de junio de 2024, apareció el primer Elepé de los Melodic Death metaleros Varices. El redondo tomó el nombre de «The Undoing».

A decir verdad, a la hora de encarar esta reseña estoy entre dos aguas. No suele gustarme la new school del «metal Muerto» melodioso. Supongo que soy demasiado viejo para ciertas cosas. Sin embargo, voy a intentar ser lo más objetivo y justo posible con el disco de hoy. Desde luego, el redondo en cuestión es bastante variado, mostrando una buena fusión entre lo viejo y lo nuevo dentro del estilo en cuestión. Cada tonada tiene punch, y ninguna, a pesar de algunos sobresaltos innecesarios en forma de clean vocals desentona lo más mínimo, mostrando así una obra compacta y solvente de principio a fin, que gustará sobre todo a lo más «modernos» del lugar.

Con las siempre aguerridas seis cuerdas os vais a enganchar sobremanera. Tenemos dobles armonías, acometidas fluidas y punzantes y otras de carácter pesado, que conviven a la perfección con anecdóticas pinceladas sosegadas.

En los registros vocales ya os he ido dejando de caer antes que tenemos ¿verdad? No entiendo la razón de tener que introducir voces limpias, aunque he de admitir que están bien traídas.

A medio gas suele ir la percusión. Vale, no se olvidan de pisar el acelerador a fondo, pero donde mejor y más se mueven es en los mid tempos.

Por su ferocidad, tal vez la más violenta de todas, destaco ‘The Deluge‘. Ah por cierto, ¿os acordáis lo que comentaba antes de los registros priscinos? pues no estaría mal que cataseis la final ‘Theater of Hate‘.