Crítica: Wolfheart – Draconian Darkness (2024)


El animal, con respiración entrecortada, cayó a plomo al suelo emitiendo un sonido rotundo y seco. Entonces, conforme emitía sonidos de dolor, su tórax comenzó a ensancharse, hasta tal punto que terminó por partirse en dos. En última instancia, la bestia agradeció que el tormento llegase a su fin. Con su último aliento, sus facciones se relajaron, e incluso parecían que mostraban paz y felicidad. De él, emergió una demoníaca criatura que comenzó a devorarlo ansiosamente, para después internarse en el bosque. Pronto necesitaría más alimento…
Bienvenidos al universo de Wolfheart.

Los Melodic Death metaleros Wolfheart, lanzará el próximo 6 de septiembre de 2024 su séptimo Larga Duración llamado «Draconian Darkness», gracias a Reigning Phoenix Music.

Su alineación es: Tuomas Saukkonen (guitarra y voz), Joonas Kauppinen (batería), Lauri Silvonen (bajo y voz), Vageliss Karzis (guitarra y voces).

Ay señor… qué tiempos aquellos donde en el «Metal Muerto» melodioso no incluían estribillos comerciales o clean vocals accesibles. No entiendo la razón por la cual las bandas de nueva cuña lo hacen. Es más, creo que automáticamente usar tales recursos se salen realmente de ese género que dicen ejecutar. A grandes rasgos, y ya metiéndonos en el redondo de hoy, no creo que nadie pueda decir que es un disco mediocre, mas a un servidor el concepto que en la actualidad se tiene del estilo ya mencionado no le hace gracia alguna. En lo estrictamente musical, hay múltiples matices que enriquecen la propuesta y expanden fronteras, de ahí a que afirme que no son para nada malos, pero…..

Las seis cuerdas pueden llegar a sorprender con riffs destensados, dobles armonías acústicas o arremetidas de Djent. Si no creéis esto último que os digo, catad ‘Throne of Bones‘.

Ya os lo decía en el párrafo principal. No entiendo los chorus suaves, lo siento. Supongo que soy demasiado viejo para cierto tipo de cosas, o demasiado cerrado de mente. Al menos, os puedo jurar que los growls tienen más presencia que los registros prístinos. Menos mal…

En la percusión los mid tempos predominan descaradamente. Ahora bien, reconozco que no esperaba que irrumpiesen anecdóticamente latigazos de blast beats a lo largo y ancho del Elepé.

Recalco ‘Evenfall‘ como la mejor del Long Play. Tampoco puedo olvidarme de ‘Death Leads the Way‘ y su toque In Flames o la ya mencionada ‘Throne of Bones‘ y el regustillo a Meshuggah que tiene.

Recomiendo «Draconian Darkness» a las nuevas generaciones de Metalheads. A los veteranos, no sé yo si les interesaría. Para saberlo, tan solo pueden hacer una cosa: escucharlo. En vuestras manos queda.

Nota: 5
Autor: Chus

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